Madrid se ha convertido en una de las ciudades europeas más visitadas del continente, y uno de los motivos que ha permitido alcanzar este hecho se debe al buen clima del que goza la capital de España.
Aunque Barcelona es su gran rival turístico a nivel nacional, en parte porque el clima mediterráneo catalán y la existencia de playa hacen sombra al madrileño, caracterizado por los extremos climatológicos que se producen entre el verano y el invierno. Es por ello que siempre es bueno conocer la previsión meteorológica para preparar a la perfección la maleta y no llenarla de ropa que luego no vamos a necesitar y que nos restan espacio para guardar algún recuerdo que queramos traernos a casa de esta impresionante ciudad.
Cómo es el tiempo en Madrid
¿Necesitaré un abanico o gafas de sol? ¿Entrará un jersey en la maleta? ¿Quizás un paraguas por si cae una tormenta? Estas son algunas de las preguntas que nos hacemos cada vez que nos disponemos a hacer un viaje a la capital española. Lo cierto es que, como ya hemos adelantando anteriormente, el clima madrileño es bastante extremo.
A nadie le tiene que sorprender si decimos que en Madrid se pasa del verano al invierno, y viceversa, no existiendo prácticamente la primavera y el otoño. La ciudad, en parte por el cambio climático y la grave contaminación que sufre, cuenta con pocos días de entretiempo entre estación y estación, siendo esta una de las principales características de la climatología madrileña, que es mediterránea continental, lo que viene siendo el comúnmente llamado clima de interior.
Cuál es la mejor época del año para ir a Madrid
Conocer la previsión del tiempo en Madrid es importante para decidir cuál es la mejor época del año para viajar a la ciudad, aunque todo dependerá de si te gusta más el frío o el calor. Hay que destacar que las lluvias se reparten a lo largo de los 365 días del año y nunca son fuertes ni torrenciales. Los meses en los que se alcanzan las temperaturas más altas coinciden con los de verano propiamente dicho, es decir, junio, julio y agosto, pudiendo sentir sofoco y bochorno, pues las máximas superan los 30ºC, mientras que por las noches no suele refrescar, ya que es el momento en el que el asfalto de la capital trata de enfriarse, desprendiendo todo su calor.
Por su parte, el invierno en Madrid cuenta con temperaturas que rondan los 10ºC, amaneciendo la mayor parte de los días con números negativos, aunque no suelen ser extremos. Es muy poco común ver nevar en la capital y cada vez que ocurre todo el mundo sale a las calles con sus móviles para inmortalizar el momento, puesto a todos extraña. Esto se debe a que, aunque se la ciudad se encuentre muy próxima a las montañas del Sistema Central, cuenta con un microclima muy diferente a sus áreas periféricas, que tienen un clima algo más extremo y constante año tras año. Los meses invernales de diciembre, enero y febrero son los más fríos y donde no podrás despegarte de la bufanda y los guantes, mientras que en octubre y noviembre no debes olvidar el paraguas, ya que son los más húmedos de todo el año.
Los meses primaverales suponen el renacer de la vida diurna y nocturna en la capital de España. El frío queda atrás y los días son más largos y luminosos, siendo el momento para disfrutar de los parques de la capital, como El Retiro o el Madrid Río. Además, también la primavera es cuando comienzan a llenarse las terrazas de las azoteas de los principales hoteles y edificios madrileños, manteniendo la temporada hasta finales de septiembre o principios de octubre. Si quieres disfrutar de una temporada cálida, pero alejada del asfixiante calor estival, la primavera es el mejor momento para conocer y patear todas las calles de Madrid.
Qué no debes olvidar meter en la maleta de Madrid
Como hemos visto, al final, como ocurre con casi todos los viajes, depende un poco de los gustos de cada uno, porque en función de los planes se quieran hacer se deberá decidir una u otra fecha para visitar esta ciudad, aunque la primavera o el final del verano sean los mejores momentos para disfrutar de la capital.
- En otoño, el paraguas no te puede faltar, pero mucho menos un chubasquero, porque Madrid es una ciudad que siempre está llena de gente y que para evitar chocar con otros transeúntes te facilitará el paseo por sus calles.
- En verano, pantalón y camisetas cortas, porque ni por las noches llega a refrescar.
- En invierno, si no quieres sufrir en exceso el frío invernal madrileño, que se te mete en los huesos para no salir, un buen abrigo, guantes, bufanda y gorro te permitirá sobrellevarlo mucho mejor.
Si sigues estos breves consejos, el tiempo no conseguirá estropearte tu estancia en la ciudad y te llevarás un maravilloso recuerdo de esta fantástica capital europea que cada vez atrae el interés de más turistas que deciden pasar por ella. ¡Buen viaje!