Suiza es sin duda uno de los países más pequeños pero con más encanto que nos podemos encontrar en el mundo. Muchas personas definen a Suiza como el país de los contrastes, territorios donde la belleza natural más sublime convive con el lujo y el turismo de compras. Y esto mismo es lo que lleva a la confusión de muchos, llegando a creer que es un país con poco que ofrecer a todos aquellos amantes del turismo cultural.
Por esta razón, queremos proponeros una ruta para ver Suiza en 7 días, así como ya os propusimos en este enlace una gran ruta por el país. En definitiva, una guía mediante la cual conocer los puntos más importantes e interesantes del país, aquellos que puedan mostrarte la riqueza y belleza cultural que tiene Suiza y, por qué no, dejar un sitio también para el turismo de compras y gastronómico, que nunca viene mal.
Lucerna
Lucerna es sin duda alguna una de las ciudades de origen medieval más conocidas e importantes de Suiza y de Europa en general. De este enclave cultural podemos destacar el Kapellbrücke, o puente de la capilla, que refleja el valor artístico que existía en la ciudad allá por el siglo XIV. De este modo, la ciudad cuenta con otros muchos puntos relevantes y preciosos que visitar, como puede ser la Catedral, pero sin lugar a dudas, una de las mejores formas de conocer Lucerna, es dejarse llevar por sus calles empedradas, sus plazas y las fachadas que cuentan cientos de historias.
Berna
Muchas personas piensan que la capital de Suiza es Zurich, pero lo cierto es que están muy equivocados. La capital de este pequeño país del que hablamos es Berna y es para muchos otros uno de los puntos más preciosos del territorio. Por esto, y para que conozcamos la historia como es debido, empezaremos a conocer Berna desde el mirador del Rosengarten, desde el que podremos observar toda la trayectoria del río Aare así como disfrutar de uno de los paisajes más bonitos del país.
Está claro que hay multitud de sitios en el mundo que merece la pena visitar, pero Berna es Patrimonio de la Humanidad y cuenta con tantas señas de identidad medieval que sólo con eso ya deberíamos lanzarnos a disfrutar y aprender de ella. Como detalle de Berna, no podemos irnos sin disfrutar de las magníficas fuentes con las que podemos encontrarnos por sus calles, sus iglesias y edificios de piedra arenisca que tan característicos son en Berna.
Zurich
Como os hemos comentado antes, muchas personas tienden a asegurar que la capital de Suiza es Zurich y la razón principal por la que se da esta equivocación es porque Zurich es la ciudad más grande del país. Sin duda alguna no puedes pasar por Suiza sin pasar por Zurich, donde podrás disfrutar de los toques más tradicionales e históricos junto a la vanguardia y el modernismo. Su mezcla de culturas e idiomas así como la gran oferta existente de planes, museos y propuestas de ocio, la convierten en un destino maravilloso, especialmente para los amantes del lujo, que tienen en Suiza un enclave privilegiado.
De este modo, si quieres disfrutar de lo más bonito de Zurich y, por supuesto, de la mejor manera, no puedes dejar de darte un paseo por el río Limmat o por el lago de Zurich, así como perderte por las antiguas calles de Niederdorf, disfrutar Grossmünter y sus campanarios o admirar la multitud de galerías de arte con las que cuenta la ciudad.
Lausana
Aunque durante nuestro viaje ya hemos tenido la oportunidad de pasar por muchos enclaves únicos de Suiza, debemos saber que aún nos queda bastante por descubrir de este país. Uno de los puntos pendientes e irremplazable es Lausana . Lausana se encuentra aproximadamente a unos 60 kilómetros de Ginebra y cuenta con todos los planes perfectos tanto para los amantes de la naturaleza como los del ocio y el arte con sus innumerables galerías. Esta ciudad se encuentra bañada por el río Lemán, uno de los más grandes de la Europa Occidental y cuenta con multitud de símbolos medievales que nos llevarán a la Suiza de aquellos años con sólo pasear por sus calles.
Así, sus enclaves más importantes a la hora de visitar la ciudad son la Iglesia de San Francisco, la Catedral de Lausana o el precioso ayuntamiento de la ciudad. Además, no queremos dejar que pase esta oportunidad para recomendaros que paséis por el mercado de Lausana y admiréis sus increíbles y pintorescas escaleras así como el museo olímpico con el que cuenta la ciudad.
Basilea
Por último, no podemos dejar de recomendaros que incluyáis en vuestro viaje una pequeña visita a Basilea, aunque os advertimos que es una ciudad para el turista más sibarita. Entre los atractivos de Basilea esta el arte por encima de todo ya que cuenta con más de 40 galerías donde no sólo se exponen obras sino que también se dan numerosos espectáculos.
Por su parte, Basilea es la ciudad universitaria por experiencia en Suiza y por eso tiene un ambiente y una vida especial. En Basilea nunca te faltarán planes y supone al mismo tiempo un lugar para relajarse como para dejarse la vida descubriendo cada uno de sus rincones.