Si por algo destaca el estado de Virginia es por sus grandes paisajes y su ambiente campestre, pues más del 60% del territorio está compuesto por bosques. Virginia, situado al sureste de Estados Unidos y con capital en Richmond, es uno de los cincuenta estados que componen el país. Así, si estás pensando en visitar la zona o tienes en tu agenda pasar una temporada allí, te recomendamos cinco impresionantes paisajes que deberías visitar :
Shenandoah National Park
El Parque Nacional de Shenandoah es uno de los paisajes más alucinantes que vas a encontrar en todo el estado. Caracterizado por sus más de 800 kilómetros de senderos naturales, no te bastará con ir una vez para conocer todo su recorrido, pero si vas a Virginia, es obligatorio pisar aunque sea una pequeña parte de esta maravilla. El punto principal para ver este parque natural está en Skyline Drive, desde el que puedes acceder al resto de rutas y atracciones que visitar. Aquí te enseñamos algunos de los sitios a los que puedes ir:
- Como hemos dicho, Skyline Drive es el punto de partida de Shenandoah, el centro de encuentro a partir del cual se comienza todas las rutas. Es una carretera de 105 millas (169 kilómetros) que recorren todo el parque a lo largo de las montañas Blue Ridge. A esta zona se puede acceder en coche y, además, está repleta de carteles con el número de la milla en la que te encuentras, por si en algún momento necesitas echarle un ojo al mapa. Esta ruta tiene una gran cantidad de miradores cada varios kilómetros y, si vas en otoño podrás disfrutarlo el doble, porque las vistas son espectaculares.
- Otra de las rutas más famosas es el Whiteoak Canyon Trail. En su recorrido hay seis grandes cascadas y pequeños arroyos en los que, en los meses más cálidos, los visitantes pueden utilizar para refrescarse. Así, en Shenandoah National Park hay una gran cantidad de enormes cascadas que merecen muchísimo la pena admirar. Las más visitadas son Overal Run Falls y Dark Hollow Falls, así que ya sabes: ¡apúntalas a tu lista!
A pesar de que el parque está abierto los 365 días del año, Skyline Drive está cerrado durante la temporada más fría, que suele ser entre diciembre y abril. Aun así, podrás disfrutar de rutas específicas de invierno para que puedas ver la zona totalmente nevada. Las temporadas en las que más merece la pena visitar este parque natural es otoño y primavera, cuando las colinas se visten de amarillo por sus flores, lirios azules y laurel blanco. Una época preciosa para admirar unas de las vistas más alucinantes de Virginia.
Otro dato muy importante acerca del parque Shenandoah es que... ¡no estás solo! Decenas de animales viven en este paisaje natural : osos, ciervos, pavos, zorros e, incluso, gatos monteses, que en cualquier momento puedes encontrarlos correteando por la zona, por lo que ten cuidado si vas en coche.
Maymont Park (Richmond)
Si te apetece pasar una tarde relajante y admirando las vistas de un precioso parque, tienes que visitar Maymont Park, en Richmond, la capital de Virginia. Maymont es una finca victoriana, antiguamente hospedada por un famoso abogado de la ciudad y su esposa que, tras su muerte, dejó el territorio en manos del pueblo.
Este famoso parque está caracterizado por sus maravillosos jardines. El más famoso de todos, el jardín japonés, que tiene un estanque koi -con carpas de diferentes colores- y una pequeña cascada. Esta zona, meticulosamente cuidada, es una mezcla de diferentes estilos y periodos de tiempo que no pasan desapercibidos para los visitantes. Además, ¡es un lugar precioso para una sesión de fotos!
Maymont Park también cuenta con un jardín italiano, inspirado en el estilo clásico del país de los siglos XV y XVI. Además, también cuenta con una cascada y un patio, denominado Patio de la Fuente que está diseñado como la Villa Torlonia, cerca de Roma. Además, si vas en primavera, cuando la flora está más bonita, podrás disfrutar del parque en sus colores más llamativos. Merece muchísimo la pena.
Smith Mountain Lake (Roanoke)
Esta visita te enamorará. El lago Smith Mountain es un gran embalse situado en Roanoke, Virginia y, a pesar de haber sido un secreto, se ha convertido en un lugar muy popular para los turistas en estos últimos años. Las espectaculares vistas que ofrece este especial lugar lo convierten en uno de los paisajes más emblemáticos del estado, sobre todo en las temporadas de primavera y verano, donde más vas a poder disfrutar de ellas. Incluso, mucha gente se atreve a afirmar que el agua cristalina de este lago lo hace el más bonito de todo Estados Unidos, así que... ¡no te lo pienses y ve a visitarlo!
En cuanto al acceso y el coste de esta visita: se puede entrar a la zona a través de propiedades residenciales privadas, que pueden ser o no de pago, dependiendo de su lugar y situación. Además, en el Smith Mountain Lake podrás hacer un montón de actividades: desde esquí acuático, hasta pesca y conducir motos acuáticas, además de diferentes viajes en barco en los que podrás admirar el paisaje más detenidamente.
Roanoke Valley Greenway
Si vas a rondar por la zona, también puedes sumar a tu lista de visitas en Roanoke, el Roanoke Valley Greenway, un camino de 30 millas en la que podrás disfrutar de una gran caminata o una ruta en bicicleta en familia. En ella, tendrás la oportunidad de visitar parques, montañas, arroyos, pasear por la orilla del río Roanoke y ver un espectacular skyline. Un estupendo plan que podrás combinar con un picnic en las áreas habilitadas de la zona.
Cavernas de Luray
A apenas dos horas de Washington D.C. y muy cerca del Parque Nacional de Shenandoah se encuentran las Cavernas de Luray: unas increíbles cuevas descubiertas por un fotógrafo en 1878, repletas de estalactitas, estalagmitas y formaciones rocosas prehistóricas que visitan casi medio millón de personas al año.
La ruta por las cavernas no dura más de una hora, pero merece la pena guardar un hueco de tu tiempo para visitarlas. En ellas, el recorrido te lleva por lagos subterráneos en los que puedes ver figuras formadas por la propia naturaleza hasta llegar al órgano Stalacpipe que, al sonar dentro de la propia cueva, el sonido es impresionante.
El precio de la visita es de 24$ (22€) para los adultos y 12$ (11€) los niños. Además, el mismo ticket te permite entrar a un museo de carruajes y coches de la época, así como una plataforma gigante con trenes eléctricos.
Virginia Beach
No podíamos hablar de paisajes naturales sin nombrar la zona más habitada de todo Virginia: su playa. Si eres más de saltar olas que de escalar los picos más altos y tu idea es ir cuando el sol más pega, esta va a ser nuestra recomendación más afín a ti. La zona más poblada del estado es Virginia Beach, la cosa del territorio. Una larga playa en la que podrás relajarte, disfrutar del paisaje e incluso pasártelo bien con tu familia y amigos haciendo algún deporte veraniego.
Además, Virginia Beach, con una longitud de más de 5 kilómetros, es un lugar ideal para disfrutar de una espectacular puesta de sol a la orilla del mar. Y si te cansas de playa, también puedes visitar el parque First Landing State y el jardín botánico de Norfolk, repleto de rosas, azaleas y senderos florales, a menos de media hora de la costa.