En los últimos años, una de las ciudades preferidas por los europeos para una escapada de fin de semana es Dublín. La capital de la República de Irlanda cuenta con numerosos rincones verdes que son perfectos para cualquier época del año y cuyo color es, además, el emblema de todo el país. Pero tampoco podemos olvidarnos de su patrimonio cultural, representado por la Catedral de San Patricio, que data del siglo XII, o el Castillo de Dublín, levantado cien años después que la anterior. Gracias al aeropuerto con el que cuenta la capital irlandesa, los viajeros aterrizan para visitar todo esto y más.
Sobre el Aeropuerto de Dublín (DUB)
Después de algún intento anterior, el gobierno de Irlanda comenzó a construir los cimientos del aeropuerto actual en 1937, a tan solo 15 kilómetros del centro de la ciudad. Fueron necesarios tres años para la finalización de las obras de la primera pista, teniendo el lugar el vuelo inaugural en enero de 1940. En aquel primer momento, la terminal tenía espacio para acoger a unos 100.000 pasajeros al año, ya que realizaba pocos vuelos. De hecho, con la Segunda Guerra Mundial se limitaron solo a ofrecer vuelos a Liverpool y Mánchester.
Una vez finalizado el conflicto bélico, el Aeropuerto de Dublín retomó su actividad habitual y la amplió. En 1947, la aerolínea KLM amplía las rutas con el continente europeo, lo que coincidió con la apertura de nuevas pistas de despegue y aterrizaje. Actualmente, la terminal puede llegar a acoger hasta 35 millones de pasajeros al año y está conectado con muchos puntos de todo el planeta, lo que hace que sirva de escala para muchas rutas internacionales.
Llegar al centro de Dublín desde el aeropuerto en coche
La forma más cómoda de llegar al centro de Dublín desde el aeropuerto es en coche. Debido a que la distancia respecto a los principales atractivos turísticos de la capital no están demasiado lejos respecto de la terminal de llegada, coger un taxi o un tránsfer privado no es mala opción.
- Taxi. A la salida de la terminal de aterrizaje esperan numeroso taxis a los pasajeros. No es la opción más barata de todas para llegar al centro de Dublín, porque ronda los 25€ o 30€ por trayecto, aproximadamente, dependiendo de la hora a la que se llegue, que va a determinar el tráfico.
- Traslado privado. Una opción todavía más cómoda que el taxi es el tránsfer privado. No es mucho más caro que la alternativa anterior, porque se sitúa en torno a los 40€, esperándote a la salida y sin necesidad de tener que pedirlo una vez estés allí.
Llegar al centro de Dublín desde el aeropuerto en autobús
El autobús es la única opción de transporte público que tienen los pasajeros del Aeropuerto de Dublín para desplazarse hasta el centro de la ciudad. Existen líneas urbanas o bien las que conectan de forma directa la terminal con puntos concretos del centro de la ciudad.
- Autobuses urbanos. Las líneas 16, 41 y 102 incluyen dentro de su ruta el Aeropuerto de Dublín. Son una alternativa muy recurrente, aunque no la preferible entre las líneas de transporte público, ya que suelen hacer muchas paradas y se eterniza el recorrido y, en ocasiones, los conductores ponen impedimentos por llevar demasiado equipaje.
- Autobús Aircoach. Este autobús opera las 24h y, aunque no es el más barato de entre todas las opciones, otra ventaja más es que es el más rápido de todos, que va directamente desde aeropuerto hasta O´Connell Street, ente otros puntos de la ciudad.
- Autobús Airlink 747. Por su parte, esta línea no opera durante el día, pero es recomendable también porque va directo desde el aeropuerto hasta O'Connell Street sin paradas intermedias, por lo que la duración del trayecto es de tan sólo 25 minutos, aproximadamente. Los billetes se pueden comprar online para evitar esperas.