Conocida en calidad de ciudad portuaria, es importante destacar que Huelva se encuentra rodeada por muchos más tesoros históricos y naturales de los que nos imaginamos. Con una población que no alcanza los 140.000 habitantes y una extensión de poco más de 150 kilómetros cuadrados, esta provincia de Andalucía hace de cada uno de sus municipios, museos y paisajes en plena naturaleza auténticas paradas en las que descubrir y aprender sobre su pasado.
Una historia que ha marcado el porvenir de los onubenses y que, año tras año, anima a muchos visitantes españoles y venidos de otras partes del mundo a descubrirla y contemplarla con sus propios ojos. Por supuesto, opciones para admirar la belleza que guarda la provincia de Huelva hay muchas, y por ello hemos querido seleccionar cuáles son esos cinco lugares más bonitos que, por nada del mundo, hay que perderse.
El Rocío y Almonte
Visitar las bonitas calles de Almonte y dejarse empapar por el puro sentimiento que transmite la aldea de El Rocío, resulta ser un plan perfecto y obligado si se tiene en mente descubrir los mejores rincones de la provincia de Huelva. Encontrándose la una de la otra a tan solo 17 kilómetros de distancia, este perfecto dúo se presenta como el plan idóneo en el que empaparse de cultura, arte y naturaleza, teniendo en cuenta que dicho municipio se encuentra rodeado por nada más y nada menos que por el precioso parque natural de Doñana. Un lugar en el que aprender disfrutando de una gran diversidad de animales y capturar instantáneas de ensueño con sus bonitos paisajes naturales.
Por lo demás, en lo que respecta al pueblo de Almonte en sí, hay que decir que no hay precisamente una gran variedad de ofertas turísticas entre las que perderse, aunque si bastante interesantes. Por ejemplo, entre sus paradas más tradicionales está la visita al Centro Cultural de la Villa, la Iglesia de la Asunción o la ermita del Santo Cristo. Además, podrás apreciar también algunos de los trabajos tradicionales que hoy en día siguen conservando los artesanos de guarnicionería. Después de esta rápida visita, se pondrá rumbo a la aldea de El Rocío, en la que se encuentra su famoso famoso santuario. Siéntete un peregrino más admirando la belleza de este lugar sagrado y conocido en el mundo entero.
Aracena
Instalado en plena sierra de Huelva, a hora y media en coche de la capital, se encuentra otra de las paradas clave en esta ruta por los pueblos más bonitos de Huelva. En este caso, se trata de Aracena, un pequeño municipio de tan solo 8.000 habitantes que ofrece amplias opciones de visita y ocio a quienes optan admirar la historia y la cultura que encierra este precioso rincón onubense. Empezando, por supuesto, por la gran joya que conservan desde hace más de ocho siglos: su fortaleza. Uno de los muchos castillos que uno puede llegar a encontrarse en Huelva y que, además, ofrece a sus visitantes la alternativa de disfrutar de su visita de forma teatralizada.
Desde allí, y tras conocer un poco acerca del pasado de Aracena, podrás continuar tu visita rumbo al centro histórico de la población, considerado desde hace más de 20 años Bien de Interés Cultural. Acércate hasta la Iglesia Prioral de Nuestra Señora del Mayor Dolor, admira la fortaleza que transmite la fachada de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, déjate llevar por el ruido de sus múltiples fuentes y no olvides admirar y degustar su gastronomía en el Museo del Jamón y la Quesería Monte Robledo. ¡Ah! Como remate final, no dejes de visitar su maravillosa y tan bien conservada Gruta de las Maravillas, en la que podrás admirar magníficas formaciones de estalagmitas, estalagtitas, coladas y excéntricas.
Palos de la Frontera
Sumamente cerca de Huelva capital se encuentra nuestra siguiente proposición: Palos de Frontera. Y podemos decir que quizá se presente como una de las paradas turísticas con mayor atractivo histórico-cultural, ya que se trata del mismísimo lugar desde el que Colón decidió emprender, junto a sus tres carabelas, el camino que le llevaría a descubrir el continente americano. Una gran oportunidad de sentirse en la piel del conquistador más conocido en todo el mundo y admirar cada una de las reproducciones de las 3 naves que acompañaron a Cristóbal Colon en el viaje más importante de su vida. Además, también tendrás la oportunidad de observar, con tus propios ojos, la belleza del Monasterio de la Rábida, catalogado como Monumento Nacional, y la Iglesia de San Jorge, desde donde salieron los marino que acompañaron a Colón.
Riotinto
Si hay algo a lo que Riotinto debe su gran fama en España es a su historia minera. Un pasado que le ha llevado a desarrollar y conservar un rico patrimonio de minas y que ha conseguido que millones de turistas se trasladen, año tras año, hasta allí para conocer un poco más acerca de este duro trabajo. Entre sus visitas más llamativas se encuentra su recorrido en el tren de la mina, que acerca un poco más a sus visitantes a la historia de la comarca, en un paseo por las casas victorianas de la ciudad y su conocido museo minero.
Asimismo, pronto descubrirás el porqué de su curioso nombre, en cuanto encuentres y admires la increíble belleza de su Río Tinto, tiñendo sus aguas de color rojizo. Aunque lo más increíble de todo es el paisaje y las grandes dimensiones de Corta Atalaya, la mayor mina a cielo abierto de toda Europa.
Sanlúcar del Guadiana
Ubicado en plena frontera con Portugal y a orillas del río Guadiana, encontrarás otro de los lugares que no podrás perderte en tu visita a Huelva. Una pequeña población cuyos habitantes no suman más de 450 y que llama la atención, sobre todo, por su estratégica situación, rodeado de pura naturaleza y a tan solo unos pasos de descubrir el país vecino. Sin embargo, a pesar de su pequeña extensión, la cantidad de opciones que Sanlúcar de Guadiana ofrece a todos sus visitantes te dejará completamente enamorado de este precioso rincón onubense.
Empezando por las maravillosas vistas posibles de divisar desde lo alto de la colina en la que se instala este pueblo, en el que además se encuentra una de sus principales atracciones turísticas: el Castillo de San Marcos. Una panorámica en la que contemplar de una sola pasada su vegetación, el discurso del río Guadiana y los antiguos molinos de viento que aún se conservan en el municipio. Además, Sanlúcar del Guadiana también ofrece la oportunidad de conocer otros monumentos históricos como la parroquia de Nuestra Señora de las Flores y puntos más naturales como la Dehesa de San Silvestre o su puerto fluvial deportivo.