Cuando se planifica un viaje a Londres, una de las visitas imprescindibles que hay que realizar es la del Castillo de Windsor. Situado a 10 kilómetros de la capital, se levanta en la pequeña localidad de la que recibe su nombre, la cual lleva ligada a la Corona británica desde hace siglos. Esto es, precisamente, lo que más interés suscita entre los turistas, que desean contemplar en primera personas el escenario de algunos de los acontecimientos más importantes de la historia de la Monarquía de Reino Unido, como bodas de Príncipes o entierros de legendarios monarcas, como el de la Reina Isabel II.
Sin embargo, estos trascendentales eventos de la Familia Real británica se llevan a cabo concretamente en la Capilla de San Jorge. Fundada en el siglo XIV, se trata de un imponente edificio que se ubica en la parte inferior del recinto del propio Castillo de Windsor y que, además de ser una de las iglesias de cabecera de la Corona, es también la sede de la Orden de la Jarretera, la orden de caballería más importante de Reino Unido. Por tanto, en esta capilla se respira historia a cada paso, aunque también es todo un estandarte de la arquitectura gótica inglesa que ningún amante del arte debe perderse.
El origen de la Capilla de San Jorge
El Castillo de Windsor hunde sus raíces en el siglo XI, cuando fue construido como fortaleza defensiva para los normandos. Sin embargo, fue a raíz del reinado de Enrique I de Inglaterra (1100-1135) cuando comenzó a ser utilizado como residencia por el monarca inglés, una función que viene cumpliendo de manera ininterrumpida desde entonces, lo que hace que posiblemente sea el palacio real habitado por más tiempo de toda Europa, habiendo sido hogar de 39 monarcas. Dentro del imponente recinto del castillo, que ocupa cinco hectáreas, se encuentra la Capilla de San Jorge, cuya fundación tuvo lugar en 1348 de la mano del Rey Eduardo III.
La creación de la Capilla de San Jorge se debe a que el rey inglés llevó a cabo la creación de un colegio religioso en Windsor, sirviendo por tanto este edificio a la organización educativa, la cual todavía sigue vigente a día de hoy y es la encargada de formar a los 20 niños del Coro de la propia iglesia. Más allá de esta función, la Capilla de San Jorge fue punto de peregrinaje del pueblo inglés durante el medievo, gracias a las reliquias que atesoraba, pero su historia se quebró durante la Guerra Civil Inglesa (1642-1651). Gran parte del templo fue destruido y su tesoro saqueado, perdiendo interés durante la proclamación de la república de Oliver Cromwell, pero pronto lo recuperaría con la Restauración monárquica en la figura de Carlos II de Inglaterra.
El renacer de la capilla en el siglo XVIII
A partir del siglo XVIII, y gracias al interés de Jorge III, la Capilla de San Jorge se configuró verdaderamente como iglesia de cabecera de la Familia Real. Este hecho motivó que la propia Reina Victoria decidiera ejecutar obras y ampliaciones en la misma, a lo que se sumó una profunda restauración desarrollada durante más de diez años en la década de los años 20 del siglo XX. Gracias a todas estar intervenciones, la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor recuperó todo su esplendor y hoy en día luce como una de las grandes joyas arquitectónicas de la Corona británica.
Sede de la Orden de la Jarretera
Además de servir de iglesia del Castillo de Windsor, la Capilla de San Jorge es también la sede de la Orden de la Jarretera. Esta orden de caballería fue constituida por Eduardo III de Inglaterra en 1348, inspirándose posiblemente en la Orden de la Banda, una orden militar que había sido fundada en 1332 por Alfonso XI de Castilla y que desapareció un siglo más tarde, a diferencia de la inglesa que todavía hoy sigue en funcionamiento.
La pertenencia a la Orden de la Jarretera es una gracia que otorga el Monarca británico, que es el Soberano de la propia organización, por haber contribuido al bien del Reino Unido. Además del Rey y del Príncipe de Gales, que son miembros naturales, está conformada por un número máximo de 24 varones o mujeres más, conocidos como caballeros o damas compañeros. El día de San Jorge, patrón de la Orden y de Inglaterra, se da a conocer los posibles nombramientos, aunque para ello tienen que haberse producido bajas.
Banderas en la Capilla de San Jorge
La Orden de la Jarretera también contempla la posibilidad de que se incorporen a ella, además de los 24 caballeros o damas compañeros, caballeros o damas reales -que son miembros de la Familia Real británica-, o caballeros o damas extranjeros -que son monarcas de otras Casas Reales, como así forma parte Felipe VI de España, entre otros-. La pertenencia a la misma otorga el privilegio de exhibir durante toda su vida en la Capilla de San Jorge sus escudos heráldicos y estandartes en el asiento que tienen reservado en el coro. Estos son, precisamente, las banderas que cuelgan dentro del propio templo y que siempre llama la atención de los turistas, pues muchos llegan a reconocer la enseña de su monarca, sorprendiéndose de ello.
La Capilla de San Jorge y la Familia Real británica
Si por algo es conocida la Capilla de San Jorge, además de por ser la sede de la Orden de la Jarretera, es por la cantidad de celebraciones de la Familia Real británica que se llevan a cabo en ella. Sin ir más lejos, el Rey Carlos III de Reino Unido contrajo matrimonio civil con Camilla Parker Bowles en el Ayuntamiento de Windsor y después celebraron una misa en esta misma iglesia, mientras que el Príncipe Harry y Meghan Markle sí que se dieron el 'sí, quiero' en la propia capilla.
Sin embargo, esta capilla también ha sido utilizada para momentos más amargos de la Familia Real británica. Concretamente, es el lugar en que se celebró el funeral en memoria del Príncipe Felipe de Edimburgo cuando falleció en 2021. De hecho, está enterrado dentro de la propia iglesia, ya que el templo también sirve de cripta real desde finales del siglo XV. No es el único miembro reciente de la realeza británica que lo ha escogido para su descanso eterno, ya que su esposa, la Reina Isabel II, también decidió ser sepultada en la Capilla de San Jorge el 19 de septiembre de 2022.
Entierros reales en la Capilla de San Jorge
Más de 50 personajes de la realeza británica permanecen enterrados en la Capilla de San Jorge desde tiempos de Anne de York, Duquesa de Exeter, hermana mayor de los reyes Eduardo IV y Ricardo II y la primera que utilizó este espacio como cripta real, concretamente la Capilla de Rutland. A ella le han seguido posteriormente muchos reyes, reinas, príncipes o princesas, hasta llegar al siglo XXI en que todavía se sigue utilizando como tal. Algunos monarcas han decidido incluso hacerse con espacios más privados dentro del propio templo, destacando los siguientes.
- Coro : En la zona del Coro de la Capilla Real, se encuentran enterrados los reyes Enrique VIII de Inglaterra, junto con una de sus esposas, la Reina Jane Seymour y madre del futuro Eduardo VI; Carlos I de Inglaterra, que falleció tras ser ejecutado en 1649, y un hijo que nació muerto de la Reina Ana de Gran Bretaña.
- Bóveda Real : situado a los pies del altar mayor, es el lugar en el que más miembros de la realeza permanecen enterrados, cerca de la mitad de todos los que hay en la Capilla de San Jorge, destacando los reyes Jorge III, Jorge IV o Jorge V.
- Capilla en memoria de Alberto : en el extremo este del coro, la Reina Victoria llevó a cabo la construcción de esta capilla en memoria de su amado consorte, el Príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo y Gotha. En este espacio, actualmente yace entre otros, su hijo Leopoldo.
- Capilla Conmemorativa del Rey Jorge VI : en ella están enterrados el Rey Jorge VI y la Reina Isabel Bowes-Lyon, junto con las cenizas de su hija pequeña, la Princesa Margarita. A esta capilla también fueron trasladados los restos de Felipe de Edimburgo para que descansaran junto a los de su esposa, Isabel II, la última gran Reina de la historia británica que quiso descansar junto a sus padres y su hermana.
Cómo visitar la Capilla de San Jorge, en Windsor
Una de las primeras preguntas que se hacen los turistas cuando llegan a Londres y están descubriendo los rincones más 'royal' de la ciudad es si es posible visitar también el Castillo de Windsor, dado que es una de las residencias usuales de la Familia Real británica. La respuesta a esta duda es sí. La visita a este recinto palatino incluye el propio acceso a la Capilla de San Jorge, salvo los domingos, en los que no será parte de la misma porque solo se abre para el culto.
Capilla de San Jorge
- Dónde: Windsor SL4 1NJ, Reino Unido
- Horario: del 1 de marzo al 31 de octubre, de 10h00 a 16h00 | Del 1 de noviembre al 28 de febrero, de 10h00 a 15h00 | Martes y miércoles de todo el año cerrado, y domingos solo abierta para el culto
- Precio: de domingo a viernes £26.50, y los sábados £28.50, contando también con descuentos para determinados colectivos
- Página web: St George's Chapel
Para poder planificar la visita, lo mejor es acceder a la página web de 'Royal Collection Trust', encargada de la gestión turística de buena parte de los sitios reales de la Corona británica. En ella no solo se adquieren las entradas, sino que podrá encontrarse información de horarios actualizada a diario, ya que, aunque haya un calendario predefinido para visitar el Castillo de Windsor, todo puede cambiar en función de si se está celebrando algún tipo de acto, lo que impide el acceso público.